En La Rioja, en el País Vasco, en lo que fuera una antigua y centenaria bodega, termina de abrir sus puertas un hotel, que construyo el arquitecto del Museo Guggenheim de Bilbao.
La última de las obras del arquitecto canadiense Frank Gehry (quien entre otras construyera el Museo Guggenheim de Bilbao), un hotel espectacular, revestido de titanio y que acaba de ser inaugurado.
Después de atravesar el paisaje salpicado con antiguas iglesias de piedra y rústicos pueblito, al sur de Bilbao, lo que menos esperamos encontrar es un contundente ejemplo de moderna arquitectura. Emergiendo de entre los viñedos se encuentra esta obra, es una mole de metal pintada en tonos rosados, dorados y plata, da la sensación de ser un gigantesco papel metálico retorcido.
Este lujoso hotel forma parte del proyecto “Ciudad del Vino”, que es una idea de la bodega Marqués de Riscal, esta empresa ya cumplió sus primeros 150 años de existencia. Ubicado en la localidad de El Ciego, en La Rioja alavesa, y no muy lejos de la otra creación de Gehry, el Museo Guggenheim.
El Guggenheim puso a Bilbao en el mapa hace casi una década, y esto desencadeno que los edificios de diseño se reprodujeran por toda España. Desde la opera de Santiago Calatrava en Valencia, con su forma de barco, hasta el aeropuerto madrileño de Richard Roger. Desde este momento, las bodegas también forman parte de esta movida, al agregar diseño de vanguardia.
Aquellos que sepan apreciar el diseño y la gastronomía y no sientan miedo de desembolsar entre 300 y 1.500 euros por una habitación, con sus baños de mármol, se sentirán mas que contentos con este hotel temático de la bodega Marqués de Riscal.
El hotel tiene sus encantos, a primera impresión nos puede parecer algo insulso, sobre todo en su interior, esta basado en un estilo urbano elegante. El toque lo dan algunas de sus paredes curvas, las lámparas y las sillas de una sola pieza, que también diseño Gehry. La vista de las montañas nos resultara, memorable. En su spa, podemos disfrutar de una sesión de vinoterapia: solo es necesario sumergirse en un bañera, imitación de una barrica de roble, que reboza de extractos de las mejores uvas.
Su restaurante nos ofrece creaciones del chef Francis Paniego, que proviene del restaurante vasco El Portal, que cuenta con varias estrellas Michelin. Se puede probar entre numerosos platos por unos 90 euros, entre los que podemos elegir, sopa fría de crema de ajo, natilla de foie de gras o helado de jamón ibérico
Si eres de aquellos que gustan de tomarse un vinillo de mas, te encontraras con una de las pocas contras que tiene este hotel: algunas de sus habitaciones pueden resultar vertiginosas, tienen ventanas angulosas y cabeceras de cuero ondulantes.